Limpiar la fosa séptica es algo natural y recomendable en viviendas unifamiliares. Es la forma de evitar que se acumule la suciedad y disminuya su perfecto drenaje.
¿En qué consiste esta tarea y cómo se puede llevar a cabo con eficiencia? A continuación encontrarás algunos consejos de profesionales del mantenimiento de fosa séptica que trabajan con Presupuestalia.
¿Qué es una fosa séptica o pozo negro?
La fosa séptica es un pozo a donde van a parar todos los residuos fecales y aguas residuales de una vivienda.
Gracias a la fosa séptica es posible depurar y filtrar las aguas residuales que van llegando. Así conseguimos que no se contamine el medio ambiente.
¿Por qué hay que limpiar la fosa séptica?
Para que la fosa séptica drene perfectamente debe estar bien limpia. Por eso se debe evitar que se acumulen lodos y otras suciedades en el pozo negro, que podrían impedir que drene las aguas residuales.
Pasos para limpiar una fosa séptica
La fosa séptica debe limpiarse aproximadamente cuando esté a la mitad de su capacidad, para eliminar lodos acumulados, suciedades y grasas existentes.
Nunca se debe extraer todo el lodo: dejaremos aproximadamente un 20% de la capacidad de la fosa, para que la depuración siga activa cuando la cerremos.
Te aconsejamos que esta tarea la haga un profesional del mantenimiento de fosas sépticas, para evitar accidentes irreparables que pudieran ser provocados por los gases tóxicos. No obstante, te contamos las claves del proceso que estos profesionales llevan a cabo para limpiar la fosa séptica.
1- Abrir la tapa de la fosa séptica poco a poco
En ella se acumulan gases tóxicos producidos por el lodo y las materias fecales. El metano irá saliendo poco a poco. Evita respirar los gases tóxicos.
2- No fumar cerca de la fosa séptica
El metano producido por la fermentación del lodo no sólo es tóxico, también es un gas muy inflamable que podría provocar una explosión.
3- Colocar la bomba de aspiración al lado de las aguas servidas
Se debe colocar a nivel del agua, para que aspire toda la parte superficial donde se depositan la mayoría de grasas y suciedades flotantes.
4- Sumergir la bomba en la fosa séptica
Hay que ir sumergiendo la bomba poco a poco, a medida que vaya bajando el nivel del lodo. La última capa es aconsejable dejarla para que siga drenando perfectamente.
5- Colocar la manguera de agua
De este modo, a medida que se va eliminando el lodo se va vertiendo agua limpia. El caudal de agua no debe ser superior al del lodo retirado.
6- Limpiar los filtros de la fosa séptica
Con agua limpia y a presión se deberán limpiar bien los filtros de la fosa séptica.
7- Dejar de aspirar el lodo de la fosa séptica
En cuanto lleguemos al 20% de la capacidad de la fosa séptica, dejaremos el lodo que quede para que siga drenando y pueda seguir depurando. Se rellenará la parte restante con agua limpia.
8- Añadir un activador bacteriano para fosas sépticas
Según las instrucciones del fabricante, se añadirá la dosis de activador bacteriano que corresponda en el pozo negro.
9- Cerrar la fosa séptica
Por último, sólo resta asegurar bien el cierre de la fosa séptica para evitar malas aperturas, que pueden ser muy peligrosas.
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